Terminada la campaña de la aceituna, comenzamos los trabajos para lo que será la campaña 2022/2023 con la poda de los olivos.
Como primera etapa en este largo viaje, hacemos la corta o poda del «ramón» . Ya expliqué lo que era el ramón ¿te acuerdas?
Hay que generar bien el árbol, limpiarlo y quitar la madera vieja, para que le entre la luz y el agua al interior. Este año mucho más imprescindible por el tiempo seco que se prevé.
Cuidando cada oliva nos da más probabilidades de tener una mejor cosecha.
Un proverbio muy antiguo decía:
La poda de los olivos después de la recolección es la que más mano de obra necesita.
Y hay varios periodos de la oliva a tener en cuenta para hacer una buena «corta» así lo llamamos aquí.
Poda de formación, se hace en olivos jóvenes para crear la estructura y lograr una oliva suficientemente equilibrada para el soporte de cosechas abundantes en un tiempo lo menor posible.
Siempre se comienza con la poda a los 3 o 4 años después de la primera cosecha.
Poda de producción, cuando la oliva ha crecido y se considera adulta, de 6 a 12 años, hay que mantener un buen equilibrio entre la calidad y producción y su desarrollo de vegetación que se adecue a la oliva. Así se alarga su periodo productivo y retrasamos el envejecimiento.
Lo que se hace es un aclareo, se podan las ramas de dentro afuera.
Poda de renovación o rejuvenecimiento, cuando la oliva ya sea vieja, con 20 y 40 años hay que podar las ramas mas decadentes para regenerarlas y creando ramas más productivas.
Lo mas habitual es podar cada dos años para que se regeneren las ramas cortadas
La oliva va incrementando su producción hasta llegar a los 35-40 años, donde sigue creciendo pero no tan rápido. Finalmente, se estabiliza entre los 65 y 80 años, que es cuando los rendimientos decrecen.
La poda de los olivos es una tarea imprescindible aunque costosa.
La labor de la poda es necesaria para mantener la estabilidad de la oliva vegetativa y reproductiva. Para aumentar la producción sin debilitarla.
Las ovejas que quedan por la zona también ayudan, ramoneando los restos que quedan de la poda y comiendo las hojas mas bajas.
Corta de olivos, en qué consiste
Una vez hemos terminado la corta, cada año le toca a una parcela diferente, ya no se quema el ramón, se tritura o pica.
Primero se traza la leña, aprovechando las ramas más recias y troncos mas gruesos, para las chimeneas y calderas de calefacción.
Se van dejando toda esta leña debajo de la oliva para luego ir a recogerla.
El resto de la leña fina se acordona para picarlas, solo se quema el ramón en los sitios que se encuentran más en cuesta, que es difícil entrar con el tractor. Esto implica rapidez, eficacia y ahorro y se evita riesgo de incendios.
Así también se incorpora materia orgánica al suelo, es un abono natural que protege en caso de lluvias fuertes y contra la erosión, en el caso de heladas y mucho calor tiene efecto aislante.
Las semillas de malas hierbas no pueden germinar porque no les llega la luz y las olivas quedan protegidas de los parásitos y de las enfermedades.
Picar el ramón ha sido una evolución muy buena además mayor rapidez, hace un bien a la tierra.